domingo, 27 de septiembre de 2015

¿Qué es verdaderamente Metal Gear?

Estuve pensando desde que se me ocurrió abrir este blog qué entrada podría ser la adecuada para comenzar a la vez que mostrar la dinámica del mismo. En principio pensé hablar de Zelda(sin duda el juego de mi infancia), el género superheroico, o directamente sobre alguna película o libro reciente que me hubiese gustado. Sin embargo, hace ya cerca de un mes que se estrenó Metal Gear Solid 5, y desde que lo jugué se ha vuelto a reactivar en mí la necesidad de hablar de esta gran saga de juegos.

Así que sin más preámbulo, allá va.

Véis que en el título de esta entrada pone "¿Qué es verdaderamente Metal Gear?", y lo cierto es que  (más allá de la simpleza de decir que es un videojuego), no existe una respuesta única a ello. Pues Metal Gear Solid  es un conjunto de variopintos elementos que pueden apreciarse tanto por separado como de manera unitaria. ¿Cómo introducir entonces al lector sobre el contenido de unos juegos tan aparentemente complejos? Pues comenzad por esto:


Lo que tenéis frente a vosotros es una canción perteneciente a Metal Gear Solid de la Playstation o PSX. (Vamos la primera Playstation que salió.) Bastará con que escuchéis de 20 a 30 segundos para daros cuenta de la belleza sonora de esta pieza.

¿Ya? Bien.

El juego, y la canción que pertenece a este juego, es de 1998. Estamos hablando de un año, sin duda alguna, revolucionario los videojuegos: Half Life, Banjo-Kazooie, Resident Evil 2, Grim Fandango, Medievil, (el magistral) Zelda: Ocarina of Time,  Xenogears... En fin, la lista es inacabable.
La pregunta que te estarás haciendo, si eres de los que saben poco de esta saga es: ¿Con todos estos juegazos, qué tenía Metal Gear de especial?

Metal Gear introdujo un concepto que hoy día es emulado por la gran mayoría de juegos en el mercado: El lenguaje cinematográfico.
A partir de Metal Gear Solid, el jugador no sólo se pone en la piel del personaje que controla, sino que se le hace partícipe como nunca de una historia, un entramado argumental complejo y (todo se diga) muy bien desarrollado. Y sí, muchos juegos como Final Fantasy VII ya habían conseguido narrar una sublime historia, pero no al nivel de inmersión que lo hizo Metal Gear. Incluso existen ocasiones en los juegos en los que se rompe la cuarta pared y los personajes le hablan directamente al jugador.

La saga comienza con un soldado novato llamado (nombre en clave) Solid Snake. Éste tiene la misión de desbaratar los planes de un grupo paramilitar o de mercenarios según se prefiera, localizado en una base llamada Outer Heaven, descubriéndose posteriormente la existencia de un arma (un tanque bipedal con capacidad para lanzar cabezas nucleares) de nombre "Metal Gear". En resumen, esto es a lo que responden los dos primeros juegos de la saga que salieron para la MSX, siendo el Metal Gear de la Play en realidad el tercero.



Solid Snake en Metal Gear Solid (PSX)

Pues bajo ésta sencilla premisa se nos introduce al mundo de Metal Gear. Parece una película de estas malas de Chuck Norris ¿verdad? "El héroe americano y espía que desbarata los planes de los terroristas." Si piensas eso, es lo normal, yo pensé lo mismo.
Sin embargo, la historia de Metal Gear desmonta todos los mitos vistos y por haber en el cine de acción americano. En otras palabras, Metal Gear y el patriotismo son tan opuestos como José Ignacio Wert y cualquier otro ser humano decente y honrado.
La razón por la que os lo explico así es porque fue así como me convencieron para jugarlo, y además no quisiera dar muchos detalles de la trama para spoilearos lo menos posible.

Metal Gear nos habla sobre las crisis económicas, la guerra y sus múltiples horrores, la amenaza nuclear, el control de la humanidad mediante la información mediática, los hábitos sociales, la educación y el lenguaje, la economía de guerra, y por supuesto, la incansable búsqueda de la paz y la libertad de sus protagonistas. Hablando de ello, aparte de Solid Snake existen dos protagonistas más a tener en cuenta, si bien Solid es el principal:



Big Boss en Metal Gear Solid: Peace Walker (PSP)





Raiden en Metal Gear Solid 2 (PS2)


De los tres ya mencionados, sin duda mi favorito es Big Boss.

Volviendo a lo anterior, cada videojuego salvo el cuarto, puede jugarse de manera independiente (o cuasi-independiente) del resto, de hecho algunos de ellos se concibieron como "el último Metal Gear", lo cual permite que cada uno de ellos aborde una temática distinta así como la variedad de protagonistas permite observar diferentes puntos de vista.

La primera entrega de la "saga solid" como me gusta llamarla, nos plantea la cuestión: ¿Qué es un soldado? ¿Un instrumento de los poderosos en el campo de batalla? ¿Un héroe? ¿O puede aspirar a escoger por qué luchar?
Básicamente ésto se plantea Solid Snake, en el primer juego. Hasta qué punto somos instrumentos de destrucción y hasta dónde estamos dispuestos a llegar. No porque nos los ordenen, no porque seamos malos, no porque encontremos placer en matar. Sino porque sencillamente es lo que somos, y no conocemos otra cosa. Y ESO, es sólo la punta del iceberg de lo que estos juegos tratan de transmitir.

Te dejo querido lector un video que, OJO, contiene SPOILERS del primer juego. Si lo ves es bajo tu propia ventura, pero si eres de los míos a los que no les importa comerse un único spoiler y le interesa más el viaje que el destino, éste vídeo te motivará a jugar a esta gran saga. Sino salta al siguiente párrafo.




Siguiendo con Metal Gear Solid 2, he de advertirte de antemano que el protagonista no es Snake, sino Raiden. Te digo que vayas con esta predisposición porque a mí este hecho no me permitió disfrutar del juego a todos los niveles posibles. Precisamente por no asumir que en esta entrega no manejabas a Snake más que en el prólogo. Con todo Metal Gear Solid 2: Sons of Liberty, nos dió a conocer una entrega que iba a ser completamente distinta de las demás. Caracterizado por la premisa "nada es lo que parece", nos introduce a un protagonista con problemas de identidad, con dificultad para distinguir qué es real de lo que no lo es, y una historia digna de una superproducción de Christopher Nolan.
De hecho ya quisieran las películas de Hollywood parecerse a Metal Gear.

Echa un ojo a este trailer:



Ahora llegamos al que es tanto para mí como para muchos considerado, el mejor juego de la saga: Metal Gear Solid 3: Snake Eater. Este juego sin duda es lo que en Sevilla conocemos como "un pepino de juego" o directamente "la polla".
Metal Gear 3 te pone en la piel de Big Boss, el segundo de los protagonistas de los que he nombrado, y la gracia está en jugar a todos los juegos previos y después darte cuenta de quién es verdaderamente este personaje y lo que implica en el contexto de la saga. Situado en el período de la Guerra Fría(1953-1962), con un novedoso sistema de camuflaje y habiéndose implementado un gameplay basado en técnicas de supervivencia (que ríete tú de Bear Grylls) hicieron de éste el juego favorito de muchos en una consola como era Playstation 2, donde el catálogo era tremendamente amplio. Pero sin duda lo que me enamoró de estejuego, fue la historia. Siendo desde mi punto de vista la más sincera, emocional y bella de todas las de Metal Gear. Éste precisamente sí trataba temas como el patriotismo o el sueño americano, pero de una manera agridulce, incluso crítica. Además de que no podía faltar a la cita aquel titán de desolación tan importante para esta saga, el "destructor de mundos" de aquel famoso poema Hinduista que recitó Oppenheimer: La inminente Guerra Nuclear. 
Todo ello sazonado con el mejor personaje femenino creado para el mundo de los videjuegos. Ni Lara Croft, ni Bayonetta, ni Samus Aran, ni Elizabeth, sino The Boss. Sin duda el personaje que mejor representa cómo debe tratarse a la mujer en el videojuego más allá de ser el cliché de fantasía erótica para los frikis de turno.


The Boss en Metal Gear Solid 3


Además de que la intro de este juego es sin más, la que se grabó a fuego en la mente de todos los que lo jugamos.




Ahora toca Metal Gear Solid 4: Guns of the Patriots. Éste en realidad no nos habla de nada en concreto. Viene a suponer la conclusión de la saga, o por lo menos de la trama principal. Tras éste Metal Gear se reveló todo acerca de los restantes juegos. Los hilos habían sido cortados, los titiriteros habían sido expuestos y los protagonistas afrontan su destino final para conseguir dos cosas con las que sólo podían soñar: La paz y la libertad.
Es imposible hablar mucho más de este juego en cuanto a su historia sin destriparte nada querido lector, por lo que lo dejaré aquí.
Eso sí puedo decirte que es el juego que más cinemáticas tiene, y eso en cierta medida puede ser molesto. Constantes interrupciones en el gameplay y tal. Pero si te has pasado el resto de juegos, te has convertido en fan acérrimo de la saga (como yo hice), y has empatizado con los personajes, este videojuego sólo puede ser descrito con dos palabras: ABSOLUTA EPICIDAD.

Échale un ojo a esto y entenderás de lo que te hablo:



En fin, no voy a hablar de Metal Gear Solid V: The Phantom Pain, porque considero que se merece una entrada separada, donde lo analice como se debe. Éste ha sido un repaso de esta gigantesca saga que espero tras leer esta líneas te animes a jugar si verdaderamente te consideras un "gamer". Te lo aseguro, no te dejará indiferente, y lo disfrutarás como no habrás hecho con ningún juego.

¿Son juegos imprescindibles para todo gamer? Por supuesto.

¿Merece la pena pagar por estos juegos? Hasta el último céntimo.


Dicho todo esto, te agradezco que hayas llegado hasta aquí y que te hayas tragado toda esta parrafada para escuchar lo que tenía que decir. Espero sinceramente que estas líneas te hayan aportado algo y te animes (si no lo has hecho ya) a jugar a Metal Gear. 

Así que a la pregunta: ¿Qué es verdaderamente Metal Gear? No puede describirse. Hay que jugarlo. Porque más que un juego es una experiencia.

Te dejo con el tema principal de Metal Gear 5 que condensa como ninguno el sentimiento que transmite esta saga. Hasta otra, querido lector.